Archivo del sitio
Lo más raro que me ha pasado como onironauta…
Espero algún día ahondar más en este tema… Pero por ahora….
Una vez, surcando el plano de los sueños, llegué a un escenario que no cree ni podía controlar del todo. Una especie de concierto nocturno, y me era imposible reconocer a la banda. Desconcertado, logré entablar conversación con una chica de unos 18 o 20 años, muy bonita. Aún puedo recordar sus verdes ojos. Hablamos un rato sobre lo que estaba pasando, la falta de control y todo eso. Por lo que pude deducir, también era onironauta. Ya sabia que el sueño iba a terminar pronto y precipitadamente le pregunté su nombre. «Susana». Al siguiente día estuve muy pensativo al respecto: No era la primera vez que hacía contacto con un colega, pero nunca me habían revelado su nombre (alguna especie de protección). Hasta que, cerca de 30 horas después, una solicitud de amistad en Facebook apareció. Una tal «Susan» algo, con quien no tenia amigos en común. Tardé horas en asimilarlo, tenía miedo. Era demasiada la coincidencia. No recordaba haberle dicho mi nombre. Para cuando había decidido aceptar, ella canceló la solicitud; además no es posible enviarle mensajes ni solicitudes. Todo sumamente bloqueado. ¿Lo hizo para decirme «soy real»?- pero más perplejo me tiene el hecho de que conocía mi nombre, y según lo poco que se puede apreciar en su perfil, es que no es de Santiago, y no es como en mi sueño a excepción de los ojos ¿Los onironautas pueden cambiar de aspecto? De hecho, hasta ese momento jamás había mirado como soy en los sueños. Pero esa es otra historia…
Saludos Totales
Prólogos de un sueño dividido. (Parte 1/3)
Prólogo 1
Falso despertar.
¿Has soñado que corres de alguien pero por más que intentas, no puedes avanzar? Sus pies le pesaban y al mismo tiempo no sentía gravedad alguna. El eco de un llanto, oscuridad y frío, por sobre todo frío.
Por más que se volteaba a mirar, no lograba enfocar la sombra de seis patas que le perseguía furiosa, con sed de sangre y neblina por doquier. Y, aunque parecía haber un final del camino, no llegaba. Apretó los ojos, se mordió los labios queriendo gritar a pesar de no sentir dolor. Lagrimas. Saliva. Sudor.
¿Has escuchado un vibrar antes, durante o después de lograr dormir? Ondas que percutían sus oídos obligando a abrir sus parpados de golpe y encontrarse en su cama gritando, iluminado por el radiante sol que violaba sus cortinas.
Miró a todos lados agitado, intentando convencerse de que ya no estaba en aquella extraña pesadilla. Sus ojos golpeados por la luz se entrecerraban. Suspiró aliviado, se relajó un momento a pesar de la extraña sensación de silencio absoluto que a nadie gusta. Levantó sus manos para frotar sus ojos, pero no sintió nada, estaban ahí pero transparentes, incorpóreas ante su vista. Intentó salir de la cama, desesperado, pero al colocar el primer pie sobre el suelo comenzó a ser absorbido por un agujero negro. Su cama entera estaba flotando en el espacio infinito a segundos de desaparecer. A pesar del escaso oxigeno, al ver como cada una de las extremidades se desprendían de su cuerpo, un caos mental le hizo gritar desesperado.
-¡Oye! ¿Me estás escuchando?
Una voz femenina le hizo reaccionar y volver su atención a la hermosa chica sentada frente a él, en una mesita de aquella cafetería en París que todos queremos conocer algún día. Sonrío coqueto y asintió para seguir escuchándola. Algo le pareció gracioso, y estiro la mano para alcanzar su capuccino.
¡Sorpresa!
Carecía de dedos, es más, en lugar de su mano encontró una carcasa color azabache con pequeños vellos, alargada como la pata de un insecto. Buscó su reflejo en el ventanal del local y pasmado, cual Gregor Samsa, vio una gran cucaracha. Rápidamente miró a la gente a su alrededor para ver sus ante semejante aberración. Pero a nadie le importaba, sólo vivían su café entre conversaciones banales.
-¡¿Me vas a escuchar o no?!
Él ya no prestaba atención, anonadado se quedó mirando a la nada intentando entender todo.
John deseaba despertar, necesitaba hacerlo.
Prólogo 2
Guía.
La abrazó por detrás y le susurró al oído: Ya, ríete un poco. – Pero su mirada seria e ida no desvanecía, de hecho se iba haciendo gradualmente más amarga. Entonces, después de varios segundos y un resoplido, respondió.
– ¿Qué es lo más raro que has soñado?
– No sé, y si es que logró acordarme; pero quién piensa en ello…
– Siempre se puede, Claudia, siempre. Peor aún sí son cosas desagradables.
– ¡Despierta! La vida es esta, no los sueños o…. Pesadillas, lo que sean.
– Dormiría mejor sí su rostro no se apareciera cada noche…
– Otra vez con eso. ¡Superalo!
Un silencio incomodo entre ambas hizo que Helena se sintiera peor. Entonces Claudia tuvo una brillante idea, o por lo menos en su cabeza sonaba bien.
– ¡Durmamos juntas! No sería la primera vez…
Helena la miró con un gesto de desaprobación y disgusto.
– Sabes de sobra que eso no va a funcionar. ¿Vayámonos de aquí?
– Pero sí yo podría cuidarte, escucharte, evitar que te atormenten.
-¡No entiendes! No sé trata de que me acosen, se trata de «quién» lo hace… ¿Vamos?
– Todo sería más fácil si confiarás en mi. Somos amigas de hace mucho y nunca me buscas.
Claudia se levantó del pasto, se limpió el trasero, sacó su teléfono del bolso y comenzó a teclear. Helena seguía intentado desenredar sus pensamientos, pues eran tan difusos y claros a la vez. Ese sueño, ese mismo episodio que cada noche le hacía despertar desesperada, capitulo de su infancia que jamas pudo borrar. No sé trataba de no confiar en Claudia, era el miedo a parecer rara y por sobre todo, a hacerle daño.
-¿Sabes por qué a pesar de todo no me asusta dormir?… – dijo Helena. Claudia fingió desinterés y se limitó a asentir. -…Porque siempre hay una persona que intenta salvarme.
-¿Alguien en especial? – murmuro molesta Claudia, con sus ojos penetrando la pantalla de su teléfono.
-Una especie de guía… ¿Has tenido sueños raros?
-¿Raros cómo? – recitó curiosa.
– Como… Visitando… A alguien.
-¿Quién-hace-eso? – se burló – ¿Y qué tiene que ver con ese «alguien»?
Helena dio un gran suspiró, se levantó, tomó sus zapatillas y comenzó a caminar con ellas en la mano. Claudia, angustiada por la duda, le siguió.
– No me digas que sueñas conmi…
Helena se detuvo en seco, le miró fijamente y exclamó:
-Tu eres la guiadora…
Otro silencio incomodo. El parque verde, tal cual debiera estar en estas fechas, observaba tranquilo como el viento levantaba un poco el vestido primaveral de Helena. El césped húmedo dejaba un ambiente fresco que los pies descalzos de ambas quinceañeras agradecían. Claudia no entendía, ni siquiera sabia que hacer en un momento así. ¿Sonreír o disimular cambiando el tema? Pero Helena aún no terminaba la frase que tanto le costó formular.
-Enton…
-…Y la acosadora, a la vez. – sentenció Helena.
CONTINUARÁ…
Tutorial #1-A Cómo soñar despiertos – «Mejorar la memoria»
¿Aún no logras tener un sueño lucido? Aquí uno de los primeros ejercicios antes de lograrlo.
1-A: Mejorar la Memoria.
Siempre soñamos. Hay días en que decimos que no tuvimos ninguno, pero la verdad es que siempre que dormimos están ahí, ya sea en forma de sueños bonitos o pesadillas. ¿Y cuál es el principal motivo? Tiene que ver directamente con la capacidad de recordar nuestros sueños.
¿Alguna vez has intentado recordar un sueño, pero entre más esfuerzo haces, más lo olvidas?
Quizás en estos momentos estarás diciendo con voz chillona: ¡Sí, así es! – Y debo decirte que gracias al cielo, hay formas de remediarlo (pero… Sí tu respuesta fue negativa, voy a pedirte que saltes al siguiente post de esta misma categoría, pues tu memoria está sobre calificada para este primer tutorial).
Hay distintas técnicas (y en verdad, las hay para todo) que nos pueden ayudar a mejorar nuestra memoria al dormir; más allá de cualquier farmacéutico de los cuales soy poco amigo, son hábitos que podemos seguir o corregir para estar (por ridículo que parezca) más despiertos a la hora de dormir. Creo que debemos buscar lo mejor de cada una y así lograr un mejor método a la hora de recordar nuestros sueños; yo aquí te expondré 3 de las cuales me han ayudado mucho.
a: No acostarse agotado.
Es que sí nos vamos a dormir muy exhaustos, vamos a poder concentrarnos muy poco. Será como parpadear y la noche (o el día, tarde, etc.) se nos pasará en un segundo psicológico. Sobre todo sí hemos estado haciendo actividades físicas o por sobre todo, mentales que nos exijan el doble rendimiento de lo normal; diremos «¡Basta de guerra! al carajo con saber que pasa mientras duermo, sólo quiero descansar». Por ejemplo dormir mientras o inmediatamente después de estudiar o trabajar; o luego de pasar horas en el computador o viendo televisión. Aquí también podría entrar el hecho de que tengamos pocas horas de dormir a causa de nuestra rutina o trastornos del sueño. Ojo con Tutorial 2: Hábitos de Sueño.
b: Bitácora de los sueños.
Síp, uno de los más clásicos y re contra trillados métodos para recordar lo que soñamos es tener un «CUADERNO DE SUEÑOS». No tengo idea el horario o dónde te gusta dormir (o soñar), pero sí nunca logras mantener el recuerdo por un tiempo prolongado, escribirlo es altamente ventajoso. Por ello, tener una libreta o cuaderno cerca de nuestra cama para anotar nuestras ultimas aventuras oníricas y luego leerlas e intentar mantenerlas en la cabeza, ayuda; posteriormente compartirlo con otros también es recomendado. Sí lo tuyo no es escribir, bien podrías hacer grabaciones en audio de tús hazañas.
c: Ejercicios mentales.
Personalmente yo estoy en constante aprendizaje en muchas ramas, como toda la gente; pero en la vida diaria tengo problemas para recordar fechas, a veces rostros, o cosas que realicé hace pocos minutos (sí, es un problema grave) pero lo he estado solventando gracias a que siempre busco juegos para agilizar la memoria. En Internet hay muchos, desde el básico «MEMORICE» hasta otros cientos. Leer ayuda bastante y por sobre todo escribir. Práctica constante es en resumen. Estudiar, estudiar, estudiar (y lo dice alguien quien se aburre muy rápido).
d: Tranquilidad.
No sentirse ansiosos por lograrlo es clave. La ansiedad mata poco a poco las ganas y energías, lo más probable es que ni siquiera te dejen dormir bien o hasta conciliar el sueño. Al despertar, antes de usar nuestra «bitácora de sueños», deberíamos quedarnos quietos un rato, no levantarnos de golpe, analizar lo que podamos recordar, ordenarlo y luego escribirlo.
e: Ganas.
Así de simple, sí algo te gusta, lo haces. Tendemos a recordar más las cosas que nos apasionan que las que odiamos. Recuerda en la escuela como te aprendías los nombres y hechos importantes de tus caricaturas favoritas, pero luego en una prueba de historia o geografía no tenias idea de nada. Claramente tiene que ver con que si intentamos recordar algo que nos gusta, lo haremos. Querer es poder. Tener ganas es suficiente para comenzar.
¡QUE QUEDE CLARO QUE HASTA AQUÍ, AÚN NO ESTAMOS HABLANDO DE SUEÑOS LUCIDOS! Estos son solo ejercicios previos a tenerlos.
Espero te sirvan y puedas llevarlos a la práctica, de lo contrario ayúdame y dime…
¿Qué otros métodos conoces para recordar los sueños?
Que duerman bien, que viajen bien.
Saludos Totales.
Las 3 líneas esenciales de este lugar.
Soy Onironauta.
No busco ser muy serio con este tema, pero la verdad da muy poco para el chiste o el comentario travieso, a pesar de que siempre trato de hablar así.
¿Con qué te puedes encontrar aquí?
Antes que todo, debemos establecer el tema central del blog: LOS SUEÑOS.
Da igual cuanto lo discutamos, cada noche tenemos cerca de 7 sueños o pesadillas; y no siempre he sido muy fanático del esoterismo, soy más bien FOLLOWER del razonamiento práctico y si algo no me cuadra, busco los argumentos que lo hagan valido. Por este motivo, los seudo interpretes de los sueños y todo ese etcétera que existe, no van de mi mano. La práctica me ha dejado estudiar el plano onírico, experimentarlo, asustarme y alegrarme, sentir alivio o incluso dolor; estos viajes los tomo más como un científico (que por cierto, no soy).
¿Qué mierda es un Onironauta?
Yo tampoco lo sabia muy bien hasta hace un tiempo, pero básicamente es una palabra compuesta: Oniro se interpreta como «soñar», y Nauta es viajero u hombre que navega (Así como ASTRONAUTA). Por lo tanto Onironauta es quien surca el plano de los sueños a su voluntad. Claro, todos soñamos, pero ¿cuántos de nosotros somos capaces de hacer y deshacer dentro de un sueño? ¿Cuántos pueden ser conscientes dentro de un sueño inconsciente?
No tengo información exacta de cuántos Onironautas existen por ahí o de que son capaces (no confundir con los «viajes astrales«, que son OTRA cosa).
Algunos dicen que es un don, colegas evangelizan que todos debemos hacerlo, y otros que simplemente son sólo mentiras. Yo digo que cualquiera puede ser Onironauta… Pero no todos.
Este blog está dedicado a aquellas personas que quieren descubrir o adentrarse en los sueños lucidos y de lo que somos capaces. Dedicado para los que se consideren colegas en este parámetro (que es bien difícil encontrarlos en la vida real). Para los que sufren de algún desorden o patologías correspondientes a dormir y, bueno, para él que le interese conocer las crónicas de este humilde Onironauta.
ESTO NO ES UN ESCAPE DE LA REALIDAD, ES OTRA REALIDAD, ES PARTE DE ELLA.
Este blog va a estar dividido en 3 secciones.
1.- CRÓNICAS DE UN ONIRONAUTA: Mis experiencias, datos, todo lo que he logrado con este pasatiempo que me ha llevado por mundos fantástico y aterradores. En verdad contarles como vive un Onironauta tanto dormido como despierto, como me convertí en tal y lo que está pasando en el mundo con esto. Dejemos claro que son artículos venidos 100% de la realidad (trataré de mentir lo menos posible jajajaja). Será como ir a la cama conmigo.
2.- LA CIUDAD DONDE PROHIBIERON LOS SUEÑOS: La imaginación tras despertar. Soy un creativo desde que nací y sí me gusta escribir ficción para una pantalla, también lo es para Internet. Esta parte del blog será dedicada a una serie de episodios entrelazados entre sí por una trama. Esto es ficción, o por lo menos el 50%. Un relato repartido en capítulos, con personaje que nunca existieron y que espero les entretenga. Obvio que el tema central son los Onironautas. Palabra clave: FICCIÓN.
3.- HUELLAS EXPERIMENTALES: Si bien no soy muy participe de está idea, creo que es una obligación civil compartir mi recopilación de respuestas ante experimentos en los sueños. Está sección es casi un tutorial. Explicaré todo lo que esté a mi alcancé y responderé dudas; haré todo lo posible por responder lo que se me está permitido. Yo siempre estoy en proceso de aprendizaje, porque nadie es totalmente experto en algo. EXISTEN LEYES Y REGLAS.
Espero escribir día por medio, mientras me dé el tiempo (o la pereza).
Que tengan buenos sueños, que viajen bien.
¡Que tonto aquel que piensa que dormir es un defecto del ser humano!
Saludos totales.
PD: Me gusta mejorar mi ortografía, si encuentras un error, te agradeceré un MILLÓN que me lo hagas saber.